Voltagabbana

La historia se repite. Es un mantra que he oído durante toda la carrera, y todavía lo veo mas como una frase hecha que una realidad histórica. No creo que todo lo que ha pasado a lo largo de la historia este condenado a repetirse, y cuando se repite, no pasa exactamente igual. Pero hay momentos y hechos históricos que hacen de esta idea parezca una realidad. Uno de estos casos es el de Italia durante la Segunda Guerra Mundial.

Y es que la Primera Guerra Mundial y la Segunda tienen muchos parecidos. En primer lugar, las alianzas fueron muy parecidas. La Triple Entente formada por Francia, Gran Bretaña, Imperio Ruso y Estados Unidos se parece mucho al de los Aliados de la Segunda Guerra Mundial (cambiando el Imperio Ruso por la Unión Soviética), al igual que las Potencias Centrales. Entre esas dos alianzas esta el caso de Italia. Italia en la primera Guerra Mundial formaba parte de la Triple Alianza (Alemania, Austrohúngaro e Italia), pero cuando la Gran Guerra estalló, Italia estuvo dubitativo de entrar en el conflicto. Un año después, en 1915, Italia se unió a la Triple Entente, abriendo otro frente a los Austriacos en los Alpes.

La historia dio la razón a Italia, ya que la Entente gano la guerra y fue premiado con el Sudtirol (Alto Adagio) y el Trentino, territorios demandados por la nación Trasalpina desde su formación. Es verdad que las negociaciones para la anexión de diferentes territorios no fueron del agrado de Italia, lo que dio pie a un victimismo de los Fascistas unos años después para conseguir el poder. Debido a esto y a las nuevas corrientes políticas fascistas y ultraderechistas que gobernaron una gran parte de Europa hizo que empezara a mirar a sus antiguos aliados alemanes después de la victoria de Hitler en 1933.

Cuando empezó la Segunda Guerra Mundial, fue un fiel aliado del Tercer Reich a pesar de sus grandes errores militares, que perjudico mas a su bando de lo que ayudo. Cuando los Aliados empezaban a ganar la guerra y conquistaron Sicilia, el rey de Italia Víctor Manuel II, mando apresar a Mussolini e hizo formar gobierno a Pietro Badoglio. También firma la paz con los aliados y se unió a ellos. En este momento, Italia estuvo dividida en dos: en primer lugar, la Republica Social Italiana, el territorio que se mantuvo leal a las potencias fascistas, y en segundo lugar El Reino del Sur de Italia, afín a los Aliados.

Los aliados consiguieron retirar poco a poco a las Potencias centrales hasta el norte del país, y el 2 de mayo de 1945 las tropas del Eje se rindieron definitivamente. Por segunda vez, en la historia, en una Segunda Guerra Mundial, Italia se paso al bando contrario cuando no veía claro la victoria. Fue una vez más como dice el título del articulo un Voltagabbana, o como se dice en castellano, un chaquetero. Pero la historia le dio la razón por segunda vez dándoles la victoria a ellos y dejando Hitler con pudo ser esta cara: